Las elecciones generales de Honduras 2025 enfrentan una grave crisis de credibilidad tras denuncias de irregularidades en el conteo de votos, según reportes de observadores internacionales, partidos políticos y medios de comunicación. El proceso, que definía la elección de presidente, 128 diputados y 298 alcaldes, ha estado marcado por acusaciones de falta de transparencia y obstrucción al escrutinio.
La Misión de Observación Electoral de la OEA y la Unión Europea reportaron que, en al menos un centro de votación en la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH), sus delegados fueron expulsados físicamente mientras intentaban supervisar el conteo. “Los observadores deben tener libertad plena para observar el proceso”, advirtió la OEA, calificando los hechos como “agresiones verbales y físicas.
Denuncias de irregularidades en el conteo
El Partido Nacional y el Partido Liberal denunciaron que, en varios centros de votación, se registraron dificultades para acceder a las actas y presiones sobre los fiscales. Según testigos, en algunos casos, colectivos afines al partido Libre intentaron impedir el trabajo de los observadores, lo que generó tensiones y retrasos en el proceso.
El Consejo Nacional Electoral (CNE) informó que, hasta el 1 de diciembre, solo se había procesado el 59.84% de las actas a nivel presidencial. Los resultados preliminares ubican al candidato del Partido Nacional, Nasry “Tito” Asfura, con un 40.87% de los votos, seguido de cerca por Salvador Nasralla del Partido Liberal (38.76%), mientras que la candidata oficialista Rixi Moncada (Libre) registra un 19.37%.
La lentitud en el escrutinio y las denuncias de irregularidades han generado desconfianza en la población y en la comunidad internacional. “El conteo definitivo podría extenderse hasta el miércoles 3 o jueves 4 de diciembre”, según el CNE, lo que aumenta la incertidumbre sobre la transparencia del proceso.
Reacciones y exigencias de transparencia
Ante las denuncias, la OEA y la UE reforzaron sus equipos en los centros de acopio para evitar nuevos incidentes y garantizar que el conteo se realice bajo estándares internacionales. “Nadie puede excluir a observadores acreditados”, recordó el CNE, citando el artículo 112 de la Ley Electoral.
Mientras tanto, los partidos opositores exigieron la nulidad de las actas donde se registraron irregularidades y anunciaron que mantendrán fiscales en todas las juntas receptoras hasta que se complete el 100% del escrutinio. “No permitiremos que se repita el fraude de 2017”, advirtió un vocero del Partido Liberal.
