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El actor británico Jamie Waylett, conocido por su papel como Vincent Crabbe en la exitosa saga cinematográfica de “Harry Potter”, tuvo un destino muy diferente al de sus compañeros de reparto. Aunque la pregunta sobre si podría ir a prisión ha resurgido, la realidad es que Waylett ya fue sentenciado y cumplió una condena de cárcel en el pasado.
Sus problemas legales se hicieron públicos por primera vez en 2009, cuando fue sentenciado a 120 horas de servicio comunitario por cultivar plantas de marihuana en la casa de su madre. Este incidente resultó en la eliminación de su personaje de las dos últimas entregas de la serie de películas.
Sin embargo, el suceso más grave ocurrió en 2012. Waylett fue condenado a dos años de prisión por su participación en los disturbios que sacudieron Londres en el verano de 2011. Un tribunal lo declaró culpable de desorden violento y de manejar bienes robados, específicamente una botella de champán sustraída de un supermercado durante los saqueos. Aunque fue fotografiado sosteniendo un cóctel molotov, fue absuelto del cargo de intento de destrucción de la propiedad.
Desde su liberación, Jamie Waylett se ha mantenido alejado de los problemas legales y de la actuación, llevando una vida muy diferente.
