El envejecimiento afecta la visión: leer con poca luz, distinguir detalles o mantener la agudeza visual se vuelve más difícil. Un estudio de la Universidad de California en Irvine sugiere que es posible revertir la pérdida de visión asociada a la edad.
El gen ELOVL2 produce ácidos grasos poliinsaturados de cadena muy larga (VLC-PUFA), esenciales para la retina. Con la edad, su actividad disminuye, reduciendo los lípidos necesarios para la visión. La solución probada en ratones fue inyectar un ácido graso específico en los ojos, restaurando su función visual a niveles juveniles.
DHA vs. VLC-PUFA: ¿cuál es más efectivo?
Aunque el DHA es un omega-3 conocido, este estudio demostró que no es suficiente por sí solo. Los VLC-PUFA mostraron una capacidad única para restaurar la función visual y revertir cambios asociados al envejecimiento ocular.
Impacto humano: esperanza para millones
Este hallazgo no solo abre la puerta a terapias para revertir la pérdida de visión, sino que también identifica variantes genéticas en ELOVL2 que podrían predecir el riesgo de degeneración macular, una de las principales causas de ceguera en adultos mayores.
Aunque los resultados son prometedores, los investigadores destacan que se necesitan más estudios para confirmar su seguridad y eficacia en humanos. Si se validan, estas terapias podrían cambiar la vida de millones de personas que sufren pérdida de visión por la edad.