El mundo de la moda está de luto. Giorgio Armani, el legendario diseñador italiano conocido como “Re Giorgio”, falleció a los 91 años, dejando un vacío imborrable.
La noticia, anunciada con profundo dolor por el Grupo Armani, revela que el creador murió en paz, rodeado de sus seres queridos, tras dedicar sus últimos días al trabajo que lo definió. Hasta el final, su pasión por la moda y su visión innovadora brillaron, consolidándolo como un ícono global.
Armani no fue solo un diseñador; fue un visionario que transformó la industria con su enfoque pragmático y su conexión única con la gente.
Armani más allá de Armani
Desde su fundación en 1975 junto a Sergio Galeotti, construyó un imperio que trascendió la ropa, abarcando estilo de vida, cine y filantropía. Su amor por Milán se reflejó en su apoyo constante a la comunidad, un detalle que lo hizo aún más querido. Ahora, su legado recae en su familia y empleados, quienes prometen mantener viva su esencia de independencia y creatividad.
La cámara ardiente abrirá este sábado 6 y domingo 7 de septiembre, de 9 a.m. a 6 p.m., en el Armani/Teatro (Via Bergognone 59, Milán), permitiendo a fans y admiradores despedirse. Sin embargo, el funeral será privado, respetando sus deseos.
Rumores sugieren tensiones por la sucesión, pero el Grupo asegura continuidad. ¿Podrá alguien llenar sus zapatos? Por ahora, el mundo rinde homenaje a un genio que vistió a estrellas y marcó una era. ¡Un adiós que sacude la moda!
