Unidades especializadas del Gobierno de Guatemala rescataron a 11 guardias del Sistema Penitenciario que estaban retenidos en motines simultáneos en dos cárceles de la capital: el Preventivo de la zona 18 y Fraijanes 2.
Las autoridades atribuyeron estos disturbios a pandilleros, que los iniciaron para protestar por medidas de seguridad más estrictas y exigir el regreso de sus líderes.
El rescate fue llevado a cabo por el Comando Antisecuestros de la Policía Nacional Civil. Durante la operación, las fuerzas de seguridad decomisaron cinco pistolas y consignaron a cinco reclusos señalados como los responsables de los disturbios. Se reportó que dos de los guardias liberados presentaban golpes, y uno de ellos, una herida de arma cortante.
Pandilleros coordinaron disturbios
Según el Gobierno, los disturbios fueron coordinados por pandilleros integrandes del Barrio 18 y la Mara Salvatrucha. Su principal demanda era que sus líderes, quienes habían sido trasladados a una prisión de máxima seguridad, conocida como Renovación 1, regresaran a las cárceles donde ejercían su poder. Sin embargo, el ministro de Gobernación, Francisco Jiménez, ha sido enfático en su postura, asegurando que el gobierno no cederá ante estas exigencias.
Estos motines son un síntoma de un problema más profundo en el sistema penitenciario de Guatemala, el cual padece de hacinamiento y corrupción, factores que permiten a los reclusos mantener el control y operar sus redes criminales.