La tradicional procesión de La Bajada, que conmemora el acto de transfiguración de Jesucristo, se realizó el 5 de agosto de 2025 en San Salvador a pesar de un evento meteorológico adverso. Según reportes, una monumental tormenta sorprendió a los centenares de asistentes que acompañaban la procesión hacia la Catedral Metropolitana.
A pesar del fuerte viento y de una baja temperatura, los devotos católicos no se detuvieron y continuaron con la tradición, demostrando su fe en esta importante fecha de las Fiestas Agostinas. El evento se completó con éxito, reflejando la resiliencia de los participantes ante las inclemencias del tiempo.
Más de trescientos voluntarios de Comandos de Salvamento, acompañados por 20 ambulancias, participaron activamente en la procesión del Divino Salvador del Mundo. Su presencia fue clave para garantizar la seguridad de los centenares de asistentes que, a pesar de la monumental tormenta, los fuertes vientos y la baja temperatura, completaron la devoción católica del 5 de agosto de 2025 en San Salvador.
La bajada, un acto de fe
La imagen del patrono de los capitalinos continuó su recorrido por las principales calles del Centro Histórico en dirección a la Catedral Metropolitana, tal como se tenía previsto en los festejos agostinos.
A pesar del inesperado aguacero, la feligresía mostró una profunda devoción al acompañar la procesión. Los asistentes continuaron su camino junto al Divino Salvador del Mundo, en un acto de fe que culminará con la tradicional “bajada” frente a la Catedral.
A pesar del inesperado aguacero que cayó sobre San Salvador, la feligresía mostró una profunda devoción al acompañar la procesión. Los asistentes continuaron su camino junto al Divino Salvador del Mundo, en un acto de fe que culminó con la tradicional “bajada” frente a la Catedral.