El Estadio Cuscatlán será el escenario de un duelo épico este viernes 10 de octubre, cuando El Salvador reciba a Panamá en la tercera fecha de las Eliminatorias CONCACAF rumbo al Mundial 2026. Más que tres puntos, este partido representa un choque de ambiciones: “La Selecta” busca consolidar su localía tras un arranque irregular (1 victoria, 1 derrota), mientras los canaleros llegan con la urgencia de romper una maldición histórica: nunca han ganado en el Cuscatlán en eliminatorias.
Un historial que pesa
Desde 1938, ambos equipos se han enfrentado 53 veces, con un balance favorable para El Salvador: 21 victorias, 15 empates y 17 derrotas (74 goles a favor vs. 67 de Panamá). Pero el dato más revelador es el dominio local en el Cuscatlán: en 11 partidos desde su inauguración en 1976, “La Selecta” suma 8 triunfos, 2 empates y solo 1 derrota (amistoso en 2014). En eliminatorias, el saldo es aún más contundente: 7 victorias, 2 empates y 3 derrotas, con un marcador global de 23-15.
“Los empates son el sello de esta rivalidad”, señalan los registros: 15 en total, con 9 por 1-1 y 5 por 0-0. Sin embargo, Panamá llega con un equipo renovado, ranking FIFA 30° (vs. 80° de El Salvador) y la ambición de clasificar a su primer Mundial. “Las estadísticas están para romperse”, declaró el DT Thomas Christiansen, quien confía en el oficio de sus estrellas como Michael Murillo (Olympique de Marsella) y Aníbal Godoy (Nashville SC).
El presente: Presión y bajas
El Salvador, dirigido por el “Bolillo” Gómez, llega con 3 puntos (victoria 2-1 vs. Guatemala, derrota 1-2 vs. Surinam). Su fortaleza será la localía (entradas agotadas en menos de 24 horas), pero con bajas clave: Henry Romero (lesionado) y posibles ausencias por fatiga post-Copa Oro. Gómez apuesta por Nathan Ordaz y Brayan Gil, pero advierte: “No cuenten con el historial; será un partido duro, como una final”.
Panamá, con 2 puntos (empates 0-0 vs. Surinam y 1-1 vs. Guatemala), necesita la victoria para no quedarse atrás. Christiansen alineará un equipo con Fidel Escobar en defensa y José Fajardo en punta, pero el factor Cuscatlán (donde Panamá solo ha empatado 2 veces en eliminatorias) juega en su contra.
Pronósticos y expectativas
Analistas locales como Gabriela Solano (Tiki Taka) ven un 2-1 para El Salvador, mientras que en Panamá, Melissa Gallego (RPC) anticipa un 2-1 canalero si evitan errores. Las casas de apuestas favorecen el bajo 2.5 goles (60% de probabilidad), alineado con el historial de partidos ajustados.
Con más de 24,000 aficionados (y un sector cerrado por sanción FIFA), el Cuscatlán será un volcán de pasión. La seguridad será máxima: 650 policías, detectores de metales y un plan anti-incidentes. En redes, el #ElSalvadorVsPanama ya es tendencia, con memes sobre la “máquina de Bukele” y cánticos de barras como @CronicasPrimera.
¿Quién romperá el empate histórico?
Para El Salvador, es afianzar su sueño mundialista; para Panamá, derribar 49 años de frustración. Como dijo Christiansen: “El fútbol premia a los valientes”. Este viernes, bajo posible lluvia, el Cuscatlán decidirá.