La empresa Colossal Biosciences, con sede en Texas, ha anunciado un avance histórico en la zoología: haber dado el primer paso para resucitar al dodo, un ave no voladora que se extinguió hace más de 300 años. Este ave, que habitaba en la isla de Mauricio, desapareció poco después de la llegada del ser humano, convirtiéndose en un símbolo de la extinción causada por la actividad humana.
El equipo de investigadores de Colossal Biosciences ha logrado cultivar células germinales primordiales de paloma, precursoras de óvulos y espermatozoides. Este avance es clave porque el dodo pertenece a la misma familia que la paloma de Nicobar, considerada su pariente más cercano. Este logro representa un hito en la hoja de ruta para traer de vuelta a una especie que ha sido un ícono de la pérdida de biodiversidad.
Técnicas de edición genética y CRISPR
El proyecto utiliza técnicas avanzadas de edición genética como CRISPR y pollos modificados genéticamente que servirán como madres sustitutas. A estos animales se les inyectarán las células germinales de las palomas de Nicobar, lo que permitirá manipular su genoma para replicar características del dodo, como la morfología de su cabeza y su robusto cuerpo.
El objetivo no es solo producir unos pocos ejemplares, sino miles de aves con suficiente variabilidad genética para formar poblaciones viables en Mauricio. Ben Lamm, director ejecutivo de Colossal, afirmó que el proceso podría completarse en un plazo de 5 a 7 años, mucho menos de lo que estimaban otros expertos.
Controversias y dilemas éticos
Aunque el avance ha generado entusiasmo, también ha despertado fuertes cuestionamientos en la comunidad científica. Leonardo Campagna, del Laboratorio de Ornitología de Cornell, señaló que, aunque el avance es “notable”, aún se desconoce información esencial sobre el comportamiento y la biología del dodo, lo que plantea dudas sobre si el organismo resultante será realmente un dodo o una versión híbrida.
Rich Grenyer, biólogo de la Universidad de Oxford, fue más crítico y calificó la iniciativa como una “distracción peligrosa”. Según Grenyer, la desextinción podría desviar fondos y atención de amenazas actuales como la crisis climática o la deforestación, que ponen en riesgo a miles de especies vivas.
Inversión millonaria y apoyo de celebridades
Colossal Biosciences ha logrado reunir un importante respaldo económico, recaudando recientemente 120 millones de dólares en una ronda de inversión que elevó su valoración por encima de los 10.000 millones. Entre sus patrocinadores figuran celebridades como Paris Hilton, Tiger Woods y Tom Brady.
Ben Lamm ha destacado que este respaldo financiero es una señal de que el proyecto no solo tiene relevancia científica, sino también un potencial transformador en la conservación y la biotecnología. La empresa ya colabora con organizaciones conservacionistas para identificar hábitats libres de depredadores, como ratas o cerdos, responsables de la desaparición original del dodo.