El amor volvió a ser esquivo para una de las parejas más mediáticas de El Salvador. Will Salgado confirmó este martes que su relación con Elizabeth Ventura, conocida como “La Chelita”, llegó a su fin definitivo. Tras un fugaz reencuentro que duró menos de un mes, la pareja puso punto final a una historia que generó expectativa en sus seguidores.
Salgado, con su característico tono directo, aclaró que este segundo intento no fue una estrategia de marketing. “No quiero que lo tomen a mal. Nuestro reencuentro fue real, sincero y verdadero”, expresó, desmintiendo rumores sobre un supuesto montaje para aumentar vistas en sus redes sociales.
Ruptura por “cosas graves” y sin reconciliación
El exalcalde también reflexionó sobre sus decisiones impulsivas. “A veces, aunque uno esté adulto, hace cosas sin pensarlo lo suficiente”, reconoció, asumiendo la responsabilidad de un romance que, aunque intenso, fue efímero. Esta declaración resonó como una lección pública sobre las segundas oportunidades y sus riesgos.
La separación es total. Salgado confirmó que “La Chelita” ya no vive con él y regresó a su apartamento en Santa Tecla. Además, Ventura retomó su trabajo previo en el rubro de alquiler de vehículos. “Se terminó, rompió, se acabó la relación”, sentenció, cerrando cualquier posibilidad de reconciliación inmediata.
A pesar del final, el tono de Salgado fue respetuoso. Deseó suerte a su expareja y marcó una distancia clara pero civilizada. Mientras Elizabeth retoma su vida independiente, Will sigue frente a sus cámaras, asumiendo las consecuencias de un amor que se vivió con la intensidad de una telenovela.
Este episodio refuerza el interés de la audiencia en la vida personal de figuras públicas, donde el corazón y las redes sociales a menudo chocan. La historia de Will y “La Chelita” queda como un recordatorio de que, incluso en la era digital, el amor no siempre sigue un guion predecible.
