En un acto cargado de simbolismo revolucionario, el presidente Nicolás Maduro desafió abiertamente el ultimátum impuesto por su homólogo estadounidense, Donald Trump, durante un mitin masivo en Caracas.
Frente a miles de simpatizantes vestidos de rojo, el líder chavista blandió la réplica de la espada de Simón Bolívar y proclamó: “¡Jamás me sacarán del poder, sea cual sea la circunstancia!”.
La declaración, pronunciada en medio de aplausos ensordecedores, ignora por completo la exigencia de renuncia inmediata que Trump le planteó en una llamada telefónica secreta la semana pasada, elevando la tensión a niveles inéditos en la relación bilateral.
El ultimátum de Trump: salida segura o consecuencias inminentes
La crisis escaló el 29 de noviembre, cuando Trump, en una comunicación de alto nivel revelada por fuentes cercanas al Miami Herald, ofreció a Maduro un “corredor seguro” para abandonar Venezuela junto a su esposa, Cilia Flores, y su hijo Nicolás.
A cambio, EE.UU. demandaba la dimisión inmediata y la entrega del poder a la oposición, permitiendo el retorno de la democracia en el país sudamericano.
“Tenés que abandonar el país ahora”, habría sido el mensaje directo de Trump, según reportes de Fox News y The Guardian, con la advertencia de que, de no cumplir, se iniciarían “operaciones terrestres” contra el régimen, respaldadas por un despliegue naval masivo en el Caribe –el mayor desde la Guerra del Golfo– y la declaración del Cártel de los Soles como organización terrorista.
Trump confirmó la llamada este domingo ante periodistas: “No quiero comentar sobre eso. La respuesta es sí”.
Poco después, la Casa Blanca decretó el cierre total del espacio aéreo venezolano, una medida que Caracas denunció como “agresión imperialista” y que ha varado a miles de venezolanos en el exterior.
Fuentes indican que Maduro contrapro pusieron una transición controlada: ceder el poder político a la oposición, pero retener el mando de las Fuerzas Armadas y exigir una “amnistía global” por presuntos crímenes, condiciones rechazadas de plano por Washington.
La respuesta de Maduro: desafío y propaganda en tarima
Maduro reapareció este lunes tras cinco días de ausencia que alimentaron rumores de huida, encabezando un acto proselitista en Fuerte Tiuna, donde juramentó a comandantes militares.
“No nos han sacado con su terrorismo psicológico ni un centímetro del camino correcto”, arengó, refiriéndose a las sanciones y la presencia naval de EE.UU. como intentos de “imponer la paz de esclavos”.
El video del discurso, viralizado en X, muestra al mandatario interactuando con la multitud: “¿Ustedes me entienden, verdad?”, pregunta, para recibir una ovación que refuerza su narrativa de soberanía inquebrantable.
En el clip de 46 segundos, Maduro enfatiza: “Jamás, sea la circunstancia que nos toque vivir, jamás nos pueden sacar del camino de construir la nueva economía productiva”.
Otros posts en X capturan el momento: lo muestra bailando en tarima, “desconectado de la realidad”, mientras otros lo califica de “narcoterrorista” ignorando la amenaza.
La oposición, liderada por figuras como María Corina Machado, celebra el ultimátum como “oportunidad para la libertad”, pero advierte de un posible caos si no hay acción coordinada.